Quiero ser Cocalero

Paulovich ®® La noticia de perfil

La otra noche, luego de enseñar a bailar tango a unas señoritas extranjeras que llegaron como observadoras internacionales al diálogo entre el presidente Evo y los prefectos, me encontré con mi amigo el yatiri Titirico en un ‘naiclú’ de El Alto llamado Malena.
El yatiri (brujo aimara) sintió envidia de mis discípulas tangueras y me dijo: “No pierdas el tiempo bailando tango con esas extranjeras, pues ellas han venido sólo de observadoras y la mayor parte está convencida de que Evo cambiará nuestra sociedad. Ven conmigo a mi mesa, donde estoy con unas cholas chapareñas que tienen mucha plata y gran alegría”.
Fui presentado a las cholitas chapareñas y me sorprendió su vestimenta moderna compuesta de jeans, zapatos de alto taco y poleras impresas con los rostros de Fidel, el Che Guevara, Hugo Chávez y Evo Morales. La más macanuda de todas me dijo: “Somos las chicas socialistas del siglo XXI y estamos festejando la caída del capitalismo y de Wall Street”.
Como el baile me enloquece, me acerqué a la más corpulenta de las cochabambinas y al ver que ella me llevaba una cabeza, hablando de estaturas, le dije con toda elegancia y distinción: “Señorita, ¿quisiera usted darme de bailar?”. Fue así que me abracé a su cintura y meta cumbia.
Cuando volvimos a la mesa nos pusimos a charlar y ella me preguntó por mi ocupación, explicándole que soy periodista y también gremialista porque tengo un quiosco en la Buenos Aires Avenue, que escribo discursos para los principales ministros del presidente Evo y también para algunos representantes de la oposición, pero como la plata no me alcanza, vivo de las remesas que me envía mensualmente mi mujer desde España.
Ella me dijo: “¿Por qué no te vienes a Chapare? Yo te compro un periódico y luego instalamos un canal de televisión”.
Le pregunté de dónde tenía tanto dinero y ella me respondió: “Soy cocalera y tengo mis chacos en Chapare, que es el paraíso de Bolivia, pues allí todos trabajamos y no tenemos conflictos sociales de ninguna clase; no hay bloqueos de caminos, nadie organiza manifestaciones, nadie pelea por ser alcalde, concejal o subprefecto y nadie paga impuestos”.
Pregunté a la chapareña por su apellido y ella respondió: “Los cocaleros somos parientes y le decimos a Evo ‘papacito’, y todos somos primos, sobrinos o ahijados de Margarita Terán, que fue nuestra líder desde que ella tenía 15 años. También fue nuestra constituyente y ahora estudia Derecho y cualquier día será ministra o embajadora. Todos la llamamos ‘mamacita’ y somos felices”.
El yatiri me hizo un guiño y me dijo: “Esta chapareña no miente, vamos a Chapare a vivir bien y sin problemas”.

Como antes ya se habia hecho, coloco algo que me parece ironico como lectura anecdotica del domingo.