jueves, 30 de octubre de 2008

Publicó "el deber"

Las inversiones de la empresa siderúrgica Jindal Steel Bolivia SA están prácticamente paralizadas porque el Gobierno aún no le entregó toda la concesión, el área no está debidamente saneada y la Alcaldía de Puerto Suárez observó la licencia ambiental del megayacimiento. A todo esto se suma la demanda que 24 hacendados al INRA del pago de $us 3 millones por la expropiación de sus tierras.

...los problemas no acaban ahí, ya que han surgido asentamientos ilegales. En Puerto Quijarro más de una veintena de personas se han apostado en la avenida naval, sin que nadie pueda hacer algo al respecto. Campesinos de Oruro, Potosí y El Alto han instalado varias carpas y chozas a la espera de que el gigante de hierro despierte de una vez.
Similar situación se constató en Puerto Suárez. Cientos de campesinos y gente de provincias del oriente boliviano invadieron los barrios 3 de Mayo, Las Malvinas y Fátima.

...El INRA y la ESM sólo contemplan el pago de $us 2 millones por la expropiación de nueve predios en una extensión de 2.300 hectáreas en las faldas del megayacimiento. Sin embargo, el pasado miércoles aparecieron 15 predios más con lo cual se estima que la entidad agraria esté obligada a pagar unos $us 3 millones.

- El ganadero Víctor Hugo Castedo tiene dos propiedades en la parte norte que colindan con el yacimiento. Es uno de los más afectados. Exige el pago de $us 350.000.

- Además han aparecido comunitarios que reclaman el pago de miles de dólares por sus pequeñas parcelas en la comunidad San Pedrito colindante con la frontera de Brasil.

Parte de la entrevista a Pritam Singh Rana, nuevo ejecutivo de la empresa en Puerto Suárez

- Y el agua y el gas...(????)
- Después de hacer estudios de diferentes fuentes para abastecernos de agua, hemos tomado la decisión de tomar el líquido de la laguna Cáceres, porque reúne todas las condiciones y nos garantiza la provisión por más de 1.500 años. Este reservorio de agua es balanceado, pues adicionalmente tiene más de 100 fuentes pequeñas que la alimentan. En lo que respecta al gas, el Gobierno boliviano se ha comprometido a darnos el suficiente energético para hacer funcionar la planta de acero. Es temprano para hablar del tema.
- Pero en el país hay crisis energética y las petroleras no están efectuando las inversiones en nuevos campos ¿Qué les garantiza a ustedes que tendrán el gas para su planta?
- Hemos tenido tres reuniones con la gente de YPFB y del Ministerio de Hidrocarburos, y creemos que todo va muy bien. Éste es un tema que debe ser tratado por el Gobierno.

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